07 diciembre 2009

Semana Zombie - Día 1: Cuando los muertos se levantaron

Últimamente ando muy metido en un tema que a todos (los frikis) nos ha llamado la atención alguna vez: los ZOMBIES (leelo con rever, que mola más). Muertos vivientes. Devoradores de cerebros vivos. Un elemento que, junto con los ninjas y robots, siempre mejora una película.

Por eso, por toda la información que estoy acumulando sobre estos seres, inauguro hoy la Semana del Zombie en “Es mi manicomio”. Siete días de temática no-muerta en la que os mostraré mis pesquisas en la literatura, cine, videojuegos y mis reflexiones sobre el zombie.

Siempre sales con una cara horrible cuando no sabes que te van a hacer una foto

Para empezar, definamos al zombie. Recurramos a la magnificencia de la Wikipedia para una definición exacta. Dice así: un Zombi (o en inglés Zombie) es, en principio, un muerto resucitado por medios mágicos por un hechicero para convertirlo en su esclavo. Por extensión, esta palabra también se usa como sinónimo de muerto viviente.

Aunque esta versión de la “leyenda” es tomada como referencia por muchas culturas (y por su literatura y cine), la figura del zombie ha evolucionado en las épocas modernas, decantándose más por una versión más… realista (dentro de lo realista que puede ser un cadáver que anda). El zombie moderno es un muerto que, en lugar de por medios mágicos, ha vuelto a la vida por medios “científicos”. Es decir, por radiaciones, virus, experimentos genéticos, etc. Siendo esto así, podríamos decir que uno de los primeros zombies de este estilo fue el conocido monstruo del Doctor Frankenstein, un muerto devuelto a la vida gracias a los avances científico-médicos de su “padre”. Como ejemplo reconocible de zombie mágico podemos citar a las momias egipcias que habéis visto en películas tantas veces.

Sin querer resultar ofensivo ni blasfemo, éste fue, técnicamente, el primer zombie.

Pero hoy en día, y como cualquiera puede comprobar echando un vistazo a los últimos títulos del género, el zombie nace fruto de uno de los mayores miedos y enemigos invencibles de la humanidad: los virus. Los no-muertos de moda no son otra cosa que personas infectadas por una desconocida y virulenta cepa de “virus zombicicadores”, que les devuelven a la vida una vez muertos tomando el control de su sistema nervioso. Así el individuo renace como algo que dista mucho de la persona que fue en vida, convertido en un ser que se mueve simplemente por su instinto más primario: el hambre.


Porque todos los zombies, mágicos o infectados, comparten una característica común que los hace tan temibles: su dieta. El zombie arrastra sus pies sin descanso por el único motivo de alimentarse de los vivos (en la mayor parte de los casos, de su cerebro). Si unimos esto al hecho de que no puedes “matar” a algo que ya está muerto, un zombie es un cazador incansable sacado de una pesadilla.

¿Cómo entonces es posible que a alguien pueda gustarle semejante horror? Porque a todos, de alguna manera morbosa, nos atrae todo aquello que tememos de manera natural y, como ya hemos explicado, el zombie reune varias de estas cosas: la muerte (y la vida después de ella), la enfermedad y la sensación de pasar de ser un cazador a ser una presa. Y como ocurre con muchos otros monstruos, los zombies tienen muchos seguidores y auténticos fans que adoran todas las historias sobre ellos. De hecho, son un colectivo tan numeroso que cuentan (como los frikis) con su propio Día del Orgullo Zombie, celebrado el día 4 de Febrero. Día en el que el cineasta George A. Romero, fundador de este género cinematográfico, estrenó “La noche de los Muertos Vivientes” en 1968. Al igual que ocurre con otros días de Orgullo, los fans salen a la calle maquillados como muertos andantes y realizan congregaciones y desfiles cojeantes por el centro de las principales ciudades de su país.

Zombies orgullosos de serlo en una congregación en Madrid

¿Qué tendrán los zombies que levantan tantas pasiones? Pues seguid atentos al manicomio durante esta semana, porque os mostraré grandes delicias que el mundo no-muerto puede regalaros.

3 comentarios:

TheRedPyramidDude dijo...

Pues no es mala ocasión de sacar a paseo el tema. Que nunca haya ninguna peli de serie Z sin Zombies (aparte robots y ninjas: un Ninja Zombie Cibernético tiene que ser casi tan potente como Chuck Norris!)

Y recuerden: la mejor medicina contra la muerte viviente, es una escopeta del 12, apuntada a la cabeza del infermo (y hay un buen montón haciendo una piña, mejor que mejor; menos efectivo para sub-zombies mañicos que hablen mexicano).

Julipy dijo...

Mira que no son de los personajillos de terror que más me gustan pero inevitablemente es lo que tu dices, tarde o temprano te interesas por el tema.

Ejemplo: www.thezombiehunters.com

Alternativa Sex 'N' Rock dijo...

Me encantó vuestro blog, me tomé la libertad de agregaros a mi lista de favoritos... Saludos!