07 agosto 2007

Siete Latidos Hondos



En la noche,
A la huida,
En el mundo de los espectros
Reposa su corazón.
Latente, cautivo.

En la noche,
Entre alborotos de huesos chocantes,
De esqueletos danzantes,
De órbitas desencajadas,
El sonido de la Bomba de la Vida.

En la noche,
En el cementerio de lo alto del monte
Relucen los fuego fatuos
Iluminando la escena;
La brisa del estío
Eleva sus macabras risas.

En la noche
El silencio no existe,
La armonía no se encuentra
Y la luna llena proyecta la verdad:
En vertical, varias filas de cipreses
Se abalanzan sobre el pueblo
Mostrando su destino a aquellos que ahora duermen,
Enseñando lo que en vida nunca aprenderán.

En la noche,
En aquella piedra central reposa su corazón
Derrochando vida, liberando sangre.
Sufre en espera a quien debe llegar solo en la oscuridad.
Los dedos largos, huesudos, yertos sin piel
A su lado
Produciendo, mientras, la música más atroz y tenebrosa.

En la noche,
Siete latidos hondos retumban marcando el ritmo.
Los cipreses encierran entre barrotes las criptas ahora,
El pueblo, inocente, se levanta.
Está amaneciendo, y el corazón...
...Muere


Igual no tiene mucho que ver con todo esto pero bueno, y, aunque ya lo has leído, para ti porque sé que te gusta la noche ^^

2 comentarios:

Anónimo dijo...

que grima...

UrothJRazail dijo...

En fin, voy a dejar un comentario más acorde con tu trabajo Nes. Me gustan mucho tus textos, especialmente las "prosas". Tines mucha creatividad para esto, además que están muy bien organizadas siempre. Me gusta además que trates tems muy diversos. Buen trabajo, ¡consultaré periódicamente tu blog para leer la siguiente!.¡Y muchas gracias por aportar esta al manicomio! ^^