Do not cross the line

- ¿Qué tenemos, Montoya?

- Lo que ve, comisario. Blog, joven, apenas dos años. Parece que hace mucho que nadie lo actualizaba.

- Jesús, mira este desastre. Está todo revuelto. ¿Un robo tal vez?

- No lo creo, señor. Es como si hubiese estado haciendo obras. Tal vez el tiempo y la perrería acabó por vencerle.

- Maldita sea. Si me diesen un céntimo cada vez que tengo que ver una web así, Montoya...
- Sería usted rico, lo sé, señor.

- ¿Sabemos de quién se trata?

- "Es mi manicomio", señor. Un pequeño blog sobre temas variados. Parece que le atraían las chorradas.

- Que llamen a los de científica y me peinen esto. Y por Dios, Montoya, eché a esos curiosos de aquí.

- Sí, señor.

- Era un crío, joder. Quién le habrá echo esto... Llevaoslo, seguro que el forense quiere echarle un vistazo antes de que cerremos esto.







- ¡Señor! ¡Un mensaje del depósito! Al parecer... ¡Sigue vivo!